La infraestructura convergente y la infraestructura hiperconvergente son arquitecturas de TI utilizadas para optimizar y gestionar los recursos del centro de datos, aunque difieren en su enfoque y en el nivel de integración de sus componentes.
La infraestructura convergente agrupa los componentes tradicionales de TI (servidores, almacenamiento, redes y software) en un solo sistema optimizado. A pesar de estar empaquetados juntos, estos componentes aún funcionan como unidades discretas. Este enfoque permite una gestión más simplificada y una implementación más rápida que los sistemas tradicionales, pero no alcanza el nivel de integración y automatización de la infraestructura hiperconvergente.
La infraestructura hiperconvergente lleva la integración un paso más allá, combinando los recursos de cómputo, almacenamiento y redes en un solo sistema virtualizado gestionado por software. Esto elimina la necesidad de componentes discretos y permite una mayor eficiencia y automatización en la gestión de recursos. De esta manera, tendrás a tu disposición un entorno físico de altísimo rendimiento, protegido, gestionado y, sobre todo, escalable directamente en la nube.
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